domingo, 17 de mayo de 2009

11. Mario Benedetti

Era el año de 1984 o 1985, no lo recuerdo bien. Cursaba los primeros semestres de la carrera de Periodismo y Ciencias de la Comunicación y, como parte de la materia de Lectura y redacción, se nos solicitó leer a un escritor de la época, de los que escribían en español.

La tarea consistiría en leer al autor y discutir en clases en torno a sus temas y al trasfondo ideológico, cultural y social que podía contener; analizar la forma de redactar, la construcción y el ritmo de las oraciones; comparar el estilo con el de otros autores y obtener conclusiones. Posteriormente hacer trabajos literarios para intentar acercarnos al estilo. Yo elegí a Mario Benedetti.

Recuerdo que compré el libro “La muerte y otras Sorpresas” un compendio de 19 cuentos de ese escritor uruguayo. Debo confesar que no estaba preparado para leer lo que leí, esperaba encontrar cuentos tradicionales, nada de príncipes y castillos por supuesto, pero por lo menos algo más apegado al concepto de cuento con el que había crecido.
Los cuentos contenidos en ese libro me parecieron poco convencionales, pero muy interesantes, escritos con un estilo ágil, ligero, que no cansa. Algunos de ellos narrados en primera persona, otros en segunda persona (eso me sorprendió mucho) en ambientes urbanos, con argumentos cotidianos y sin rebuscamientos ni complicaciones, sin aspectos raros y con finales inesperados y sorprendentes.

Particularmente recuerdo uno, Miss Amnesia, un cuento que tiene la propiedad de terminar con los mismos párrafos y las mismas palabras con que empezó (en ese entonces la maestra dijo que era un cuento circular). Recuerdo que durante muchos años pretendí hacer algo similar. Me cansé de intentarlo, nunca lo conseguí. Se necesita el genio y la magia del Benedetti.
Los demás cuentos tratan temas que yo no pensaba podían ser material para escribir: la soledad, las dificultades de comunicación y convivencia, la conciencia de la muerte, los deterioros causados por el paso del tiempo, la fealdad, entre otros. Todos los cuentos ambientados en escenarios urbanos y con protagonistas de la clase media uruguaya. Algunos de ellos impregnados de las corrientes políticas que prevalecían en Latinoamérica y particularmente en el Uruguay de finales de los 60’s.

Hoy, Mario Benedetti está muerto, sus letras callaron. Sus atmósferas viven, sobreviven en el tiempo, sus historias pueblan el universo de la literatura hispanoamericana y mundial. Deja como legado más de 80 obras entre las que destacan Primavera con Esquinas Rotas, La Tregua, Cuentos Montevideanos y La Muerte y Otras Sorpresas.

Hoy, no pude evitar recordar aquellos años de mis primeras lecturas del Benedetti y no pude evitar escribir estas líneas.

1 comentario:

  1. una ves casi muero asfixciada (o como se escriba) por el ajonjolí que traen en la orilla las pizzas benedettis. me atraganté, pk además tenía tos y eso sólo ayudó a que el ajonjolí se atorara más en mi garganta y m produjera una tos incesante... lo peor era que estaba en el foro ah-kim-pech con mis amigas a punto de ver a moderato jajaja ke oso!!!

    mmm por cierto... pobre señor, descanse en paz... mmm no se que más decir... cri cri cri

    besitos... tkm... mily

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