viernes, 3 de junio de 2011

141. El meteorito campechano.

No recuerdo exactamente cuando fue, debió ser entre 1974 y 1976 o tal vez uno o dos años después (para no meternos en mayores problemas diré que fue a mediados de los años setentas) cuando los campechanos de esa época fuimos sorprendidos por un insólito e inusual fenómeno cósmico.

Antes de relatar tan extraño suceso, debo referir que Campeche era en ese entonces una ciudad pequeña en la cual las leyendas, mitos,  relatos cargados de terror e historias extrañas corrían con extrema rapidez. Es por eso que cuando se presentó el suceso astronómico que a continuación relataré, las opiniones y explicaciones proporcionadas por la población se exageraron en gran magnitud.

En aquellos días yo contaba con 12 años tal vez un poco más, eran cerca de las 10 de la noche, me acababa de acostar a dormir, pero aún no me agarraba el sueño, de pronto sucedió. En un principio, parecía que una enorme piedra rodaba sobre el tejado de la casa, incluso se escucharon las rodadas, las tejas brincaban como si se tratara de un terremoto, casi al mismo tiempo el patio se iluminó por completo. Un segundo después todo había terminado y la calma regresó.

Es cierto, el cielo quedó tranquilo, pero en la ciudad empezó el revuelo humano. Mi hermano me cuenta que algunos amigos salieron a la calle gritando que el mundo se estaba acabando, las vecinas en ropa de dormir se asomaban a verificar que todo estuviese bien (y a regañar a los escandalosos catastrofistas) y los adultos empezaban a cuestionarse y a buscar porqués. Los comentarios y explicaciones empezaban a circular en forma desatada.

Algunas personas aseguraban que vieron pasar una gran esfera de fuego por el cielo, lo que motivó a creer que se trataba de un meteorito. Muchos afirmaban no solo haber visto el bólido sino que además, lo vieron caer en el mar en medio de una terrible explosión. Algunos otros testificaban que se trataba de un Objeto Volador No Identificado que pasó volando muy bajo para después estrellarse en algún lejano paraje del planeta.

Al otro día en la escuela, los más escépticos afirmaban que era una señal de que el fin del mundo estaba cerca y que la bola de fuego era la señal inequívoca de que todos íbamos a morir quemados. Otros más decían que la invasión de los extraterrestres había dado inicio y que dentro de poco tiempo las hordas alienígenas nos estarían persiguiendo para esclavizarnos o darnos muerte
.
Algunos, que se sentían muy intelectuales pero que en realidad estaban influenciados por las películas de espionaje tan de moda en esos tiempos, señalaban que se trató de un avión espía de la Unión Soviética que fue derribado por caza bombarderos norteamericanos. Agregaban que ese suceso desataría la tercera guerra mundial y que bombas atómicas caerían en todas las regiones del continente americano.

Los medios de comunicación no abonaron para aclarar los hechos, por el contrario alimentaron los rumores y el temor de la gente al señalar que nadie podía tener una explicación ni científica, ni teológica ni natural de tan particular acontecimiento. Por otra parte, afirmaban que el hecho había sido presenciado por los habitantes de toda la Península de Yucatán y que incluso en algunas comunidades había ocasionado incendios y otras desgracias.

Durante varias semanas, esta historia fue el tema central de pláticas es escuelas, centros de trabajo, restaurantes y otros sitios de reunión, hasta que poco a poco se fue diluyendo de la de la memoria colectiva y de la temática popular (seguramente sustituido por algún otro tema, indudablemente, mucho más trivial).  

Lo realmente cierto es que nunca supimos exactamente de qué se trató; terminamos por pensar que efectivamente, había sido un meteorito que cayó en algún lugar, muy probablemente en el mar.

Nunca ha habido otro hecho parecido en nuestra ciudad, nunca más nos hemos visto acosados por meteoritos, naves espaciales, tribus marcianas, aviones soviéticos ni guerras mundiales. La única amenaza latente que continuamos teniendo, es la del fin del mundo. Ya veremos qué pasa en diciembre del 2012.


4 comentarios:

  1. Mamá siempre cuenta esa historia jeje.. ke lo vió en la puerta de la casa con tío Beto :P

    ha de haber sido algo muy de miedo jaja incluso si pasara en la actualidad.. sólo espero ke no, porke mi papitingow esta muy lejos como para defenderme de los alienigenas xD jejeje

    te kiero papito!!!

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  2. Mis papás también me lo han contado. Mi abuela dice que se asusto pk no solo se iluminaron los patios, también se iluminaron los cuartos obscuros de la casa. Dice que el comedor se ilumino.

    Fue muy loco. Lástima que nadie supiera que fue.

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  3. Mi mamá igual me la a había contado en alguna ocasión. Yo vi un meteorito hace como 2 años, fue en la madrugada, cruzó buena parte del cielo y luego se despedazó en el aire y desapareció.

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  4. Mi abuelita que en paz descanse lo vivio, gritaba mi pobre vieja cuenta mi mama... ese sonido se escucho a aproximadamente 90km de campeche, por que donde ellos vivian era ese lugar llamado los chenes...

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