Hoy no es un buen día para retomar el hábito de escribir, sin embargo he decido hacerlo sin tener claros los motivos, sin un tema determinado y sin muchas ganas de hacerlo. Sin embargo, creo que es bueno empezar el año haciendo algo que realmente me gusta. Por eso estoy escribiendo estas líneas errátiles.
La última vez que publique una entrada en esta Miscelánea de lo Cotidiano (y que la visité, por que deben saber que ni siquiera me había asomado por ella) fue el 24 de septiembre pasado; si somos completamente estrictos y benévolos, no es mucho tiempo. Pero creo que existen personas que no son completamente estrictas ni benévolas y que por ello han dejado llegar hasta este triste escribidor sus reclamos, algunos discretos otros airados, por la falta de publicaciones.
¿Por qué no había escrito? No lo sé. No tengo completamente esclarecidas las causas que propiciaron este repentino y molesto desapego a las letras. Temas han existido muchos, desde los completamente trágicos (no quiero escribir aún sobre eso) hasta los divertidos y locos, pasando por aquellos asuntos que le están dando un vuelco inesperado pero necesario a mi vida (de esto hablaré en otras entradas).
Las condiciones técnicas han existido, quiero decir, la computadora no se echado a perder ni se me suspendió la conexión a internet. Tampoco he estado cargado de trabajo de tal manera que me sea imposible disponer de tiempo para escribir. Por lo que respecta a mí, me he mantenido equilibrado, sereno y claro, tanto física como mental y emocionalmente. Por lo que tampoco se puede atribuir el desapego a una profunda crisis personal.
Simplemente me alejé, como sucede con todas las cosas, como sucede con las personas. Tal vez les ha pasado, de pronto se alejan de alguien sin saber porqué, de pronto dejan de ir a algún lugar sin motivo o dejan de hacer cosas nada más que porque sí. Eso es exactamente lo que me sucedió a mí. Es simple a la que inexplicable.
Óscar fue el primero que demandó, él dijo algo que fue muy agradable para mí escuchar (o leer mejor dicho, porque el reclamo fue electrónico) “Espero las entradas de la Miscelánea como esperaba de niño el Selecciones de Reader's Digest”. Pueden imaginar a alguien comparando mis entradas con esa revista tan de moda en los años setentas, ese alguien tendría que ser Óscar obligadamente. María José también reclamó y además, fue la portavoz de nuevas exigencias.
Por eso estoy aquí, batallando con el teclado, luchando por ordenar las ideas, lidiando con mis malestares y preocupaciones. Tratando de darle sentido y rumbo definido a estas líneas pero sin lograrlo completamente. No importa, lo que si es importante es que estoy aquí, reencontrándome con la Miscelánea (ya vendrá el tiempo deponerme al día con los Apuntes en Fuga, su caso es más dramático) y con las personas que me hacen el favor de leerme.
Podría aprovechar la oportunidad para hacer un firme propósito de año nuevo relacionado con la escritura y actualización constante de mis blogs, pero no lo haré, no quiero sentirme obligado y forzado, ni entregar entradas mediocres solamente por el afán de escribir. Además no tengo ganas de hacerlo (el propósito).
De cualquier manera ya estamos de vuelta, ha sido más sencillo de lo que esperaba. Saludos a todos y feliz 2011.
:) es weno ke ya estes de welta en tu blog.. tkm papiringow!!!
ResponderEliminarYa vez?...que te costaba?.... acuérdate que los escribientes no tienen vacaciones y que bueno que estas de regreso en el mundo de las letras.Te comparto que atendiendo una idea que vi por ahí, yo inicie el año con un nuevo blog que intenta dar entrada a una foto nueva cada día, por los próximos 365 días, es un ejercicio de constancia y disciplina, hasta ahorita todo va bien.
ResponderEliminarEs maravilloso que estes escribiendo de nuevo, nos haces falta, y mas ahora que estaras un poco lejos en cuanto a distancia. Gracias por una excelente cena !!!! te quiero mucho !!!!
ResponderEliminarPues ahora que te mudes, nos vas a tener que estar escribiendo todo constamente para que no te extrañemos tanto u.u
ResponderEliminar